Introducción
La aprobación del dictamen de la Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2026 (LIF 2026) representa un hito fiscal para el país y, por ende, una señal de alerta para empresas, contadores y asesores fiscales. La Cámara de Diputados avaló un techo de ingresos por más de 10.2 billones de pesos para 2026, lo que equivale aproximadamente al 22.5 % del PIB, siendo la recaudación tributaria la columna vertebral de ese monto.
Este contexto obliga a los responsables de cumplimiento fiscal y planificación de empresas a revisar su operación, anticiparse a obligaciones nuevas y afinar estrategias para mitigar riesgos. En este artículo le explicamos los aspectos esenciales del cambio, cómo pueden afectarle y qué debe usted hacer ahora.
1. ¿Qué cambios clave contiene la LIF 2026?
1.1 Elevación de la recaudación y mayor carga tributaria
La iniciativa proyecta que más del 57 % de los ingresos federales provendrán de impuestos.
En términos concretos:
- Recaudación por impuestos estimada en torno a 5.8 billones de pesos para 2026.
- Impulso a impuestos especiales (como el IEPS) para bebidas saborizadas, tabaco, apuestas y juegos con contenido violento.
1.2 Ajustes en deducibilidad y tratamiento fiscal para sectores específicos
El Paquete Económico 2026 incluye modificaciones en el tratamiento de deducciones, mayores exigencias documentales para créditos incobrables y para la deducibilidad de ciertos gastos empresariales.
1.3 Fiscalización ampliada y nuevas reglas administrativas
- Mayor acceso de la autoridad a información financiera y operaciones digitales.
- Fortalecimiento de facultades de comprobación del Servicio de Administración Tributaria (SAT) y otros órganos.
- Incremento de recargos y penalidades por pagos extemporáneos.
1.4 Endeudamiento, déficit y contexto macroeconómico
Aunque la prioridad del Gobierno es la disciplina fiscal, la LIF 2026 contempla un endeudamiento neto adicional (alrededor de 1.47 billones de pesos) y un déficit proyectado en torno al 4.1 % del PIB.
2. ¿Cómo le afecta esto a usted y a su empresa?
2.1 Impacto en operatividad, costos y precios
Si su empresa opera en sectores como bebidas saborizadas, tabaco, apuestas, videojuegos u otras actividades sujetas a impuestos especiales, enfrentará una mayor carga fiscal directa, lo que puede afectar márgenes y requerir ajustes de precios al consumidor.
2.2 Mayor necesidad de documentación y soporte fiscal
Con reglas más estrictas sobre deducibilidad y fiscalización, es imperativo que su empresa revise sus políticas de crédito incobrable, reporte de gastos, contratos, facturación electrónica y demás soportes fiscales. Una deficiencia en este rubro puede derivar en contingencias.
2.3 Flujo de caja y financiamiento
El incremento de recargos y penalidades implica que los retrasos en el pago de impuestos tendrán un costo mayor. Su tesorería debe prever esa eventualidad. Asimismo, los impuestos crecientes pueden requerir que remodele sus proyecciones de liquidez y capital de trabajo.
2.4 Riesgos de auditoría y cumplimiento
Con la mayor vigilancia del SAT y autoridades fiscales, el riesgo de ser objeto de auditorías, requerimientos e incluso procedimientos de cobro es mayor. Estar “preparado” es no sólo aconsejable sino necesario.
3. ¿Qué hacer ahora? Recomendaciones de acción inmediata
- Realizar un diagnóstico interno: revise partidas vulnerables (deducciones, incobrables, impuestos especiales) y simule escenarios con las nuevas cargas.
- Actualizar documentación y políticas: asegúrese de que contratos, políticas de crédito, facturación electrónica, archiven correctamente soportes fiscales.
- Revisar precios y estrategia comercial: en sectores gravados, evalúe si sus precios requieren ajuste y cómo comunicarlo a sus clientes sin impactar marca.
- Optimizar flujo de caja: contemple mayor provisión para impuestos, recargos y posibles auditorías. Ajuste su planificación financiera.
- Capacitar al equipo fiscal-contable: asegúrese de que su personal está familiarizado con los cambios del Paquete Económico 2026.
- Integrar asesoría experta: actualice su estrategia con un asesor fiscal de confianza (como Hegewisch López Consultores) para anticiparse y mitigar contingencias.
Conclusión
El escenario fiscal para 2026 apunta a una carga más rígida, mayor vigilancia y menor margen de maniobra para los contribuyentes. Sin embargo, también plantea una oportunidad para que las empresas que adopten la planeación, la documentación y el cumplimiento como pilares, obtengan ventajas competitivas en un entorno más exigente.
Para mantenerse al frente de los acontecimientos, es recomendable que usted anticipe los cambios, involucre a su equipo fiscal-contable y trabaje con asesoría profesional especializada como la de Hegewisch López Consultores.
